La amenaza de cortes de gas en Europa pone en peligro el abastecimiento de alimentos en supermercados
Europa respira después de conocerse que la compañía de gas rusa Gazprom ha restablecido el suministro de gas por el gasoducto Nord Stream 1. No obstante, la Comisión Europea (CE) no se fía de Vladímir Putin y ha puesto en marcha un plan de reducción de la demanda de gas en el que propone un recorte en el consumo del 15% de forma voluntaria hasta la próxima primavera y la imposición de cortes de gas obligatorios, en caso de alerta de la seguridad de suministro. Un plan que preocupa a la gran industria en España que avisa que de cumplirse se podría producir desabastecimiento de alimentos en los supermercados y productos esenciales por el parón de la actividad industrial.
Así lo ha explicado a OKDIARIO el director general de la Asociación española de fabricantes de papel (Aspapel), Carlos Reinoso, en calidad de portavoz de la Alianza por la Competitividad de la Industria Española, que ha explicado que «en caso de que se ponga en marcha el plan de reducción de la demanda de gas que ha propuesto la Comisión Europea, la gran industria española se vería gravemente afectada por la imposición de recortes en el suministro de gas de forma obligatoria, hasta tal punto que tendrían lugar roturas en la cadena de suministro provocando desabastecimiento de productos básicos como los alimentos, el cartón o el plástico destinado para los envases».
«La industria alimentaria es un gran consumidor de gas, que emplea con el objetivo de conservar la frescura de los productos más tiempo, la preservación del sabor y la calidad de los alimentos. Pero no sólo en este sector, los gases industriales son necesarios en la industria química, energética, así como para la elaboración de plásticos o de caucho, la producción de medicamentos e incluso para la investigación», argumenta el director general de Aspapel.
Tal es su importancia, que una reducción de la demanda de esta energía, que ya se ha comenzado a registrar por sus altos precios, es sinónimo de crisis y pone en juego la recuperación de la actividad industrial.
Piden al Gobierno que actúe
Ante esta situación, que podría acabar en desabastecimiento de productos por las roturas en la cadena de suministros, Las principales asociaciones representantes de la industria española han pedido al Gobierno que se oponga a la intención de la Comisión Europea de, en un sistema de alerta, obligar a los Estados miembros a reducir su consumo de gas en unos porcentajes preestablecidos, un mecanismo que se activaría unilateralmente por Bruselas o por petición de dos Estados miembros.
«No tiene sentido imponer reducciones de consumo de gas en todos los países por igual, independientemente de su situación particular y de que el gas no consumido pueda o no ser exportado y consumido por otros países de la Unión Europea», señalan en conversaciones con este diario.
Desde el Ejecutivo ya han mostrado su descontento con el plan de Bruselas para hacer frente a la crisis energética provocada por la invasión rusa de Ucrania y ya ha confirmado que «no va a aprobar una ley que obligue a bajar el termostato a los españoles», dejando a un lado las imposiciones para acatarlo en forma de recomendaciones.